Tras superar un diciembre por demás complejo, con la finalización de los cursos, las tormentas y el excesivo calor, con la Navidad e incomunicado por la falla del servidor de internet, llegamos a lo más deseado durante meses...el viaje.
Para que todo parezca más rápido, que mejor que nos envien una pizza a nuestro departamento, con el fin de preparar las valijas o maletas, lo más pronto posible.
¡Que tema el armado de valijas con hijos!. Creo que es un tema por demás conocido, asi que como por arte de magia, ya las tenemos armadas...
Por supuesto que en la foto faltan integrantes de nuestros viajes. Como no olvidarnos de "Bebu" la muñeca de Majo. O de nuestra cámara fotográfica con su bolso, La conservadora con las botellas de Coca y Agua...¡¡no se pierden ningún viaje!!
En esta oprtunidad, tenemos un nuevo "integrante" (o invitado, mejor dicho), que nos acompañará durante todo el viaje, "Garmin", que si bien es un aparato de GPS, te habla con voz femenina y en español (Donación Flia. Giordanelli - Murray)...recalculando.
Entonces, tenemos el equipaje preparado, solo resta dormir hasta las 5 de la mañana para cargar el auto con rumbo oeste.........
Gritos de personas...muchos. Sirenas. Ruidos metálicos que se multiplicaban. Todo ese conjunto de ruido los sentía cada vez más cerca, y ¡cada vez era más fuerte!
Todo oscuridad. Me reconpongo en la cama. Miro hacia la calle por el balcón....y el ruido persistía. Se me ocurre mirar y como por arte de magia, unas doscientas bicicletas con sus dueños a cuestas, con pelucas en algunas oportunidades, circulando por la puerta de nuestro edificio. Giro la vista hacia el reloj....1:28 AM. Cosa maravillosa, cosa de no creer....doscientas personas bicicleteando por la ciudad un viernes a la madrugada en pleno éxodo turistico, como titula la prensa....Nunca más me dormi...
Con el correr de las horas, los integrantes de la familia se fueron levantando. Con quejas por mosquitos y bicicletas ruidosas, solo bastaba cerrrar el departamente, cargar el equipaje y salir a la General Paz, primero, Acceso Oeste después, y continuar por la Ruta Nacional 7 hasta San Luis.
Primera parada, Junín. Desayuno en la Petrobras donde contestamos mensajes al celular y disfrutamos de unas deliciosas facturas. Tanque lleno de Podium, y a continuar hasta Laboulaye, Córdoba para almorzar.
A la altura de Rufino un pequeño chaparrón que nos mantenía la temperatura ambiente, ideal para el viaje.
Llegamos a Laboulaye, pero decidimos prolongar el almuerzo hasta Vicuña Mackenna ya que teniamos fresco el desayuno en Junín, aún.
Milanesas para todos en "El camionero", la parrilla en las afueras de la ciudad recomendada por el policía que nos revisó el uso de los cinturones de seguridad.
Continuamos viaje hacia la capital puntana. El paisaje de la ruta, es la misma monotonía pampeana a la cual estamos acostumbrados. Mucho cultivo próximo a la cosecha, y todo llano....mas las vaquitas ajenas y la milagrosa soja.
La ruta 7 de pronto se transformó en autopista, señal que cruzamos el límite. Estamos en San Luis.
Paramos en Villa Mercedes en una de las tantas YPF que posee. Y como hace 9 años, pasamos por la Calle Angosta, la de una vereda sola....y la del Boliche Don Miranda.
Era la hora de la Siesta, el termómetro marcaba 35°. Solo muy pocos se animaban a circular por la calle, y menos por la ruta. Restaban tan solo cien kilómetros de autopista, algo bacheada, que Cecilia se puso al volante.
Bastante extraña la ciudad de San Luis...Por un lado, nos encontramos con ese clásico paisaje desértico que con los años no se modifica. Pero por el otro, una Terminal de Omnibus de última generación, edificios muy modernos y una Av. Illia que revienta a la tarde con sus cientas de mesas en las veredas de bares, pubs y restos.
Caminamos algo bastante....y a dos cuadras del casco histórico de esta ciudad de la cual esperaba mucho más, nos encontramos con el monumento al mal gusto (jaja). A dos cuadras de la plaza, con su Catedral, su Banco Nación, su imponente edificio art-deco del Banco Hipotecario, de la peatonal, de la Comisaria y del Colegio Nacional nos encontramos ............una foto lo dice todo:
Si, acertaste....es un Casino. Más precisamente la entrada, porque por la calle lateral te vas a encontar con esto (notese el cartelito con la leyenda "SOLD")
Realmente esperábamos mucho más de San Luis, nos quedamos con Merlo como atractivo turístico provincial.
Mañana será el turno de San Juan, previo paso por las Quijadas.
No me olvidaba....en honor a los doscientos bici-despertadores:
Nota de Blogger: demás esta decir que si los doscientos ciclistas estaban lookeadas como en la tapa del disco de Queen, estarían viendo otras fotos...Chau chau chau chauuuuuu.